Actualmente, el riesgo de una detonación nuclear es altísimo | 5.° parte

La detonación puede ser involuntaria. Las tensiones globales por la invasión rusa a Ucrania se han incrementado notablemente, como en la Guerra Fría. El gobierno ruso, como forma de amedrentar a la OTAN, ha amenazado de manera explícita que usará armas nucleares si atacan la “integridad territorial de Rusia” o si otras naciones intervienen en la guerra.

Por Juan Vernieri

Estados Unidos no ha declarado explícitamente que vaya a responder utilizando armas nucleares, pero ha expresado que Rusia se enfrentaría a “consecuencias catastróficas”.

Algunos comentaristas de los medios de comunicación occidentales y “expertos nucleares” han insinuado que, si Rusia decide emplear armas nucleares, quizás use lo que se conoce como un arma nuclear “táctica”. Estas armas son, según sostienen, pequeñas bombas que no causarían grandes estragos.

Esos comentaristas están absolutamente equivocados: no existen las bombas nucleares pequeñas. Es una Interpretación incorrecta e irresponsable.

Pese a que algunas armas nucleares “tácticas” poseen una fuerza explosiva de potencia relativamente baja, todas y cada una de las armas nucleares pueden entrañar niveles de destrucción catastróficos, especialmente si se emplean en áreas pobladas.

Hoy se considera que una bomba atómica como la arrojada en Hiroshima, de 15 kilotones, es una bomba pequeña.

La Unión Soviética fabricó la llamada Bomba del Zar, bomba de hidrógeno responsable de la mayor explosión provocada por seres humanos. Fue detonada el 30 de octubre de 1961 como demostración, a 4 kilómetros de altitud sobre Nueva Zembla, un archipiélago ruso situado en mar de Barents, en el océano Ártico.

Esta bomba sería aproximadamente 3125 veces la arrojada en Hiroshima. Debido a su enorme tamaño, no era práctica para su uso real, y fue creada principalmente con motivos de investigación científica y propagandísticos debido a la intensa rivalidad existente en la Guerra Fría.

Se planeó, además, fabricar otra del doble de potencia, pero el programa quedó cancelado al advertirse que no podría ser probada por los efectos que causaría. No hay lugar en la tierra donde pudiera detonarse tal bomba sin causar daño a miles y miles de seres humanos.

El arsenal nuclear de Rusia no incluye armas nucleares pequeñas; las más pequeñas tienen una fuerza explosiva de 10 kilotones.

Por la bomba de 15 kilotones arrojada en Japón, alrededor de 140.000 personas perdieron la vida, y muchas más fallecieron debido a quemaduras por radiación o a cánceres. Además, los efectos de la radiación causaron un impacto negativo intergeneracional, afectando al sistema reproductivo de quienes estaban por dar a luz.

El Comité Internacional de la Cruz Roja ha subrayado que es imposible brindar asistencia médica o humanitaria tras la detonación de un arma nuclear, ya que seguramente hospitales y centros médicos quedarían destruidos.

Las armas nucleares no deben llegar a usarse nunca, pues su objetivo es prevenir los conflictos e impedir su uso. No mantienen la paz, y causan inseguridad, inestabilidad y violencia.

Los Estados con armas nucleares se gastan alrededor de 70 mil millones de dólares al año en ellas; esa cantidad de dinero resultaría muy preciada para lidiar con la crisis del cambio climático, la pobreza y las pandemias.

El conflicto actual requiere de manera urgente que se reduzcan las tensiones y que se ponga en práctica la diplomacia y el diálogo.


Entradas relacionadas:

Actualmente, el riesgo de una detonación nuclear es altísimo | 4.° parte

Actualmente, el riesgo de una detonación nuclear es altísimo | 3.° parte

Actualmente, el riesgo de una detonación nuclear es altísimo | 2.° parte

Comentarios

Entradas populares